¡Llegó la época de gastar dinero incontrolablemente! Sí, es la Navidad. Esta festividad comenzó celebrando el nacimiento del niño Jesús, aunque algunos también la conocen como la llegada de Santa Claus. Hoy día, probablemente la mayoría de las personas la conocen mejor como la época en la que todos van en busca de los aparatos electrónicos más modernos durante el “Black Friday”, listos para abrir ellos mismos la tienda (como en un Best Buy de Puerto Rico) y armados con lo que puedan encontrar con tal de entrar primero (tal y como lo hizo una mujer con gas pimienta en un Wal-Mart de Los Angeles).
Es verdad que el gastar dinero impulsa la economía de un país, pero el nivel al que se ha llevado es una ridiculez. Se ha perdido el compartir en familia y se ha reemplazado con la compra de bienes materiales. Sin embargo, como el dinero aparentemente reina sobre la tradición para las tiendas, y para aprovechar la tendencia del consumidor a estar de buen ánimo durante la temporada de Navidad, venden artículos en precios bajos. Lo que el consumidor algunas veces desconoce es que pueden estar estafándolo, ya que pueden estar vendiéndole un producto a un precio más alto del regular o un producto inferior al que se anuncia.
En fin, es increíble ver lo que hoy día es la Navidad. Lo que se supone que sea una época en la cual lo mejor de nosotros sobresalga se ha convertido en una temporada para conseguir todo barato, sin importar como actuemos para obtenerlo, ya sea robando o agrediendo a los demás. Antes de concluir, los dejamos con una pregunta basada en un motín ocurrido en un Wal-Mart de Arkansas: ¿Se puede justificar esta conducta por unas wafleras a dos dólares?
José Carreras y María Méndez para Dimelooo